Este espectáculo es un ritual que sucede cuando las puertas del más allá se abren. Es entonces cuando los viajeros de la oscuridad cruzan el túnel entre la vida y la muerte, para recolectar las almas perdidas en el camino.
“El Túnel de las Almas Perdidas”
En las noches más oscuras, cuando la luna se oculta tras un velo de nubes y las estrellas apenas titilan, ocurre un fenómeno extraordinario. Las puertas del más allá se entreabren, revelando un pasaje secreto entre los reinos de la vida y la muerte. Este pasaje, conocido como “El Túnel de las Almas Perdidas”, es transitado por viajeros de la oscuridad.
Los viajeros son seres enigmáticos, vestidos con túnicas negras que parecen absorber la luz. Sus ojos brillan con una intensidad sobrenatural, y sus pasos son silenciosos como el viento. Cruzan el umbral con determinación, como si estuvieran cumpliendo una antigua promesa.
Su misión es recolectar las almas perdidas que vagan en la penumbra. Almas que no encontraron su camino hacia la luz ni descendieron al abismo. Almas que quedaron atrapadas en el limbo, susurros olvidados en el viento.
Con manos etéreas, los viajeros tocan las frentes de las almas perdidas. En ese instante, las almas recuerdan sus vidas pasadas: amores truncados, sueños rotos, secretos inconfesables. Las lágrimas fluyen, y las almas se liberan de su carga. Los viajeros las guían hacia el túnel, donde la luz y la oscuridad se entrelazan.
El túnel es un corredor de sombras y luces danzantes. Las almas caminan hacia su destino final, donde serán juzgadas por sus acciones terrenales. Algunas encuentran redención y ascienden hacia la luz, mientras otras se hunden en la oscuridad. Los viajeros observan en silencio, testigos de un ciclo eterno.
Cuando el amanecer tiñe el cielo, las puertas del más allá se cierran lentamente. Los viajeros regresan al abismo, sus rostros imperturbables. Pero en sus ojos, quizás, se refleja la tristeza de las almas que dejaron atrás. El Túnel de las Almas Perdidas aguarda su próxima apertura, y los viajeros seguirán su eterno peregrinaje entre los mundos.
“¿Qué sucede?»
La multitud que los rodea está fascinada. Sus rostros reflejan una mezcla de asombro y emoción. Algunos espectadores están tan cerca que pueden sentir el calor del fuego en sus rostros. Otros observan desde una distancia segura, pero todos están hipnotizados por la habilidad de los artistas.
El sonido crepitante del fuego se mezcla con la música de fondo que acompaña el espectáculo. Las sombras de los artistas se proyectan en las paredes de los edificios, creando una atmósfera mágica y misteriosa.
«Un espectáculo de calle combina peligro y arte de manera impresionante. Es un momento efímero que une a la comunidad y deja una impresión duradera en quienes lo presencian».
Lunes a Viernes de 9:00h - 20:00h
Online Todos los días 24h
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San José de la Rinconada, 41300
Sevilla, España
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